El trastorno por ciclo sueño-vigilia diferente de 24 horas (No-24), conocido en inglés como Non-24-Hour Sleep-Wake Disorder (Non-24), es un trastorno del sueño neurológico en el que el ciclo sueño/vigilia de una persona sobrepasa las 24 horas. La persona no puede adaptar el ciclo sueño/vigilia a la duración del día, y su fase de sueño retrasa más y más cada día. Por ejemplo, si la persona se duerme a medianoche y se despierta a las 8 de la mañana un día, puede ser que no pueda dormirse hasta la 1 o las 2 de la mañana la noche siguiente, y tendrá que dormir proporcionalmente más tarde la próxima mañana. El retraso no para a la 1 o las 2 de la mañana sino que sigue empeorando cada día hasta que la persona se duerme a las 4 de la mañana, 10 de la mañana, 2 de la tarde, etc. Al final, la fase de sueño retrasa de 24 horas y la persona vuelve al punto de partida y el proceso sigue. Para algunas personas, la duración del ciclo cambia día a día, y no pueden pronosticar su horario de sueño/vigilia con antelación.
En inglés la designación oficial según la Clasificación Internacional de Trastornos de Sueño (ICSD-3, publicado en 2014) es Non-24-Hour Sleep-Wake Rhythm Disorder. La edición anterior (ICSD-2, publicado en 2005) usaba el nombre de Circadian Rhythm Sleep Disorder – Free Running Type. También se llama Hypernychthemeral Syndrome o simplemente Free-Running Disorder (FRD). El DSM-5 lo llama Circadian Rhythm Sleep-Wake Disorder – Non-24-Hour Sleep-Wake Type.
No. Aunque se cree que el No-24 afecta a más de la mitad de los individuos completamente invidentes, también afecta a algunas personas videntes. Sin embargo, las causas subyacentes son distintas, y éstos deben ser vistos como dos trastornos distintos.
No. No-24 es un trastorno neurológico del sueño. Puede causar problemas psicológicos porqué es extremamente difícil hacer frente a los síntomas, y muchas veces hay una falta de comprensión de la familia, los amigos, los empleadores, y a veces incluso de los médicos. Para muchas personas, es difícil entender que las horas del sueño anormales pueden ser inflexibles y fuera del control de una persona. La falta de aprobación de los demás puede afectar al empleo, relaciones, y autoestima de una persona con No-24.
Muchas personas intentan hacer frente al No-24 esforzándose en mantener un horario normal. Con lo cual, hay una carencia de sueño crónico con síntomas que imitan la depresión, síndrome de déficit de atención, síndrome de la fatiga crónica, fibromialgia, o simplemente cansancio. A un paciente que se queja de no poder dormirse, le pueden diagnosticar erróneamente insomnio primario y recetarle somníferos. A un paciente que se queja de cansancio, le pueden diagnosticar erróneamente depresión y recetarle antidepresivos. En algunos casos, por supuesto, el paciente está sufriendo depresión, pero puede ser secundaria, resultado de una lucha constante con el cansancio o el fracaso en el trabajo o en los estudios.
Las personas sufriendo de No-24 realmente no pueden dormirse a una hora normal. No pueden cambiar su reloj biológico estropeado. En términos médicos, no pueden sincronizarse a un horario día/noche normal.
La mayoría de las personas con No-24 no pueden dormirse más temprano, aunque lo intenten.
Muchas personas con No-24 duermen profundamente. Si tienen que levantarse para el trabajo a una hora que sus relojes biológicos equivocados consideran la noche, puede ser que no oigan sus despertadores. Tal vez se despierten, con dificultad, pero vuelven a dormirse. Esto pasa sobre todo si ya acumulaban falta de sueño.
Las personas con No-24 que intentan llevar horarios de trabajo fijos, por ejemplo desde las 9 de la mañana hasta las 5 de la tarde, o estudiantes que tienen que asistir a clases durante horas fijas, generan falta de sueño. Esto ocurre porqué no importa el sueño que tengan, no podrán dormirse a la misma hora cada noche. Pero aún así, tienen que levantarse a la misma hora por la mañana. De modo que quizás no duerman, o duerman poco, durante la noche y trabajen durante las horas que sus cuerpos necesitan sueño. Sus trabajos se ven afectados. Se exponen a tener accidentes. La falta de sueño continua afectando a su salud física y mental.
Los padres que tienen No-24 pueden tener que despertarse temprano por la mañana para darles el desayuno a sus niños y mandarles a la escuela. Otros problemas incluyen dificultades para encontrar y mantener relaciones, ir de compras cuando las tiendas están cerradas, y levantarse para ir al médico o para otras citas. Esto es particularmente difícil para las personas cuyos días cambian de duración, porque no pueden pronosticar con antelación cuando estarán despiertos.
Se necesita más conciencia de que el Non-24 es una discapacidad real, junto con más inclinación a debatirlo sin términos que culpen al individuo. Tal conocimiento también promovería esfuerzos para encontrar arreglos razonables.
Hay muchos efectos a largo plazo de la falta del sueño para la salud. Pueden incluir depresión, una sistema inmune débil, trastornos de ansiedad, aumento de peso, fibromialgia, diabetes, y cáncer.
Muchas personas con No-24 se sienten reposadas y alerta si pueden dormir durante las horas que requieren sus cuerpos. Pero otras tienen cansancio crónico, incluso si pueden dormir cuando dictan sus ritmos circadianos. La investigación indica que algunos de sus sistemas internos pueden no estar sincronizados. Por ejemplo, su sistema digestivo puede no estar sincronizado con el sistema de sueño/vigilia, algo parecido al jet lag.
No-24 es muy poco común. Se cita una incidencia de 0.03%. No-24 ocurre principalmente entre individuos invidentes, aunque también afecta a algunas personas videntes.
Para algunos, No-24 empieza en la infancia. Para otros, empieza en la pubertad. Hay algunos que primero padecen Síndrome de la fase del sueño retrasada (Delayed Sleep Phase Syndrome), que luego evoluciona a No-24 cuando envejecen.
Normalmente, un especialista en trastornos del sueño estudiará la historia clínica y las quejas del paciente. Si se sospecha un desorden del ritmo circadiano, el médico requerirá un diario de las horas que de sueño y vigilia del paciente. Se puede obtener monitorizando los patrones de sueño/vigilia mediante un monitor de actividad que se lleva puesto en la muñeca como un reloj y que estudia los movimientos del paciente. La historia clínica del sueño es más útil si se obtiene cuando el paciente duerme en su horario normal, sin intentar cumplir los requisitos del trabajo o de los estudios. Muchos pacientes ya han investigado los desórdenes del ritmo circadiano, y llegan preparados con un diario del sueño.
A menudo el especialista en trastornos del sueño pedirá una polisomnografía (estudio del sueño) para encontrar o descartar otros desórdenes tales como la apnea del sueño o el síndrome de las piernas inquietas. Para personas con No-24, esta prueba debe realizarse cuando el paciente puede dormir normalmente, esto es, durante la fase del sueño del paciente, lo cual puede ocurrir durante cualquier periodo del día. Algunos médicos pedirán un prueba de latencia múltiple del sueño (PLMS o TLMS) durante el día del paciente, para evaluar la posibilidad de la narcolepsia. En algunos pacientes, puede ser que haya varios desordenes presentes, u otro desorden puede ser la causa de los síntomas.
Los especialistas en trastornos del sueño intentan tratar el No-24 sincronizando al paciente a un ciclo de sueño de 24 horas. Primero, el paciente tiene que esperar hasta que su horario de sueño haga un ciclo a las horas deseadas. Entonces, se instruye al paciente utilizar luz brillante por la mañana, restringir exposición a luz por la noche, y/o tomar la hormona melatonina por la noche, intentando estabilizar el ritmo circadiano del cuerpo a las horas deseadas. Puede ser eficaz para algunas personas, y para otras no. Muchos médicos recetan medicamentos para ayudar a la gente a dormirse. Puede ayudar a algunas personas a dormirse cuando desean, pero a menudo no mejora la calidad del sueño, y el paciente queda cansado durante el día. Muchas personas reaccionan mal a los medicamentos y tienen que parar de tomarlos, y algunas personas los encuentran ineficaces.
Para muchas personas que sufren No-24, dormir un horario normal puede ser difícil o imposible, y tratar de hacerlo sólo resulta en falta de sueño y estrés, con todas las consecuencias perjudiciales que pueden resultar. Encuentran que pueden ser mucho más productivos y felices al vivir su horario errante, al cual sus cuerpos vuelven de forma natural. Para las personas con casos severos, ésta puede ser la única opción razonable.
Para quienes el tratamiento resulta ineficaz, el No-24 puede hacer imposible mantener un horario de trabajo o estudio fijo. Para quienes que tienen trabajos que requieren un horario fijo, además de los estudiantes que tienen que asistir a clases regulares, si el tratamiento fracasa, el No-24 es una discapacidad. Las escuelas y los empleadores en los EEUU son requeridos, según La Ley sobre Estadounidenses con Discapacidades de 1990, a proporcionar arreglos razonables, que incluyen trabajos a tiempo parcial u horarios de trabajo modificados. Los trastornos del sueño dan derecho a los estudiantes al plan educativo sección 504. Consulta a un abogado para más información. En otros países pueden existir requisitos parecidos para arreglos razonables.
Permitir más flexibilidad en las horas de trabajo. Permitir a los trabajadores trabajar desde casa, a las horas en las que pueden. Permitir horarios de trabajo más breves, con salarios proporcionales, para quienes lo necesiten por cansancio crónico. Para los estudiantes, permitirles asistir a clases dadas a horas no estándar, o grabadas en video, o en línea; o reconocer que tal vez se pierdan algunas clases, aunque puedan seguir con las tareas del curso. Proveer horarios de realización de los exámenes a horas adecuadas. Permitirles una carga docente más ligera, aunque el estudiante tenga que graduarse más tarde.
El No-24 no afecta a la inteligencia. Sin embargo, la somnolencia afecta a los estudios, a la concentración, a la memoria, y al periodo de concentración. Adaptaciones en las rutinas de estudio pueden ser necesarias. Esto se puede conseguir con la cooperación del personal de la escuela. Es importante identificar a los niños con No-24 lo más pronto posible para evitar que desarrollen un hábito de fracaso, fomentando así una baja autoestima.
Hay muchas investigaciones sobre la naturaleza básica y el papel del sueño, que no se entiende bien. Hay progresos en el conocimiento de las vías genéticas, neurológicas, y químicas involucradas en el reloj circadiano. Se han realizado estudios con animales, y en algunos casos con sujetos humanos, pero pocas veces con pacientes con No-24. Hay investigaciones en curso sobre los efectos de la luz, oscuridad, y melatonina en el ritmo circadiano. Se necesita investigar más para aclarar las causas de este desorden.
El Circadian Sleep Disorders Network está registrado con el Internal Revenue Service de los Estados Unidos como una organización no lucrativa 501(c)(3).
Lo promueve concienciación, arreglos, apoyo e investigación sobre las cuestiones de los trastornos del sueño del ritmo circadiano. Por favor, visite nuestra página web, www.CircadianSleepDisorders.org (también: csd-n.org) para más detalles, para más información acerca de estos desordenes, y para imprimir éste u otros documentos similares, que pueden ser repartidos libremente. Y, por favor, ¡únete a nuestra organización si tú o tus niños están afectados por el No-24!
Muchas gracias a Maggie Goodman por esta traducción. Traducción revisada por Lo Bellver.
